El sábado me fuí con Calamito a pasar el día a Albarracín, quería leer los cuentos que los niños de 1º van escribiendo cada semana y allá que nos fuimos los dos.
Le encantaran todas y cada una de vuestras historias y os anima a seguir tan creativos como hasta ahora.
Disfrutamos de lo lindo pues a pesar del frío que hacía, en casa de mis primos reinaba el calor y la alegría del reencuentro y es que, ya se sabe, con la familia nos unen lazos muy especiales que nos hacen sentirnos muy a gustito. Aprendimos lo que era un algarazo o algarobe ya que mientras comíamos y soplaba el cierzo empezó a neviscar y estaba todo negro si mirabas hacia el norte pero si mirabas en otra dirección lucía el sol y el cielo estaba despejado, curiosísimo fenómeno.
Algunos de vosotros os preguntareis quién es Calamito. Pues aquí os lo presento. Es un simpático camaleón que nos escribió al cole, a los alumnos de 1º, nos ofrecía su amistad y como no, la aceptamos encantados. Así es que nos sorprende de vez en cuando con sus cartas en las que nos cuenta sus andanzas, nos escribe trabalenguas ...
Por cierto que este año aún no se ha estrenado, seguro que ya está preparando algo para nosotros.
Y el domingo cambio de ambiente, esta vez tocaba playa aunque nos ha acompañado el sabor del pan redondo del horno de leña de Albarracín, sabor al trigal, al pinar, a la sierra, delicioso.
Cortado como la hacían nuestros padres. Aquí os presento a mi amiga Beatriz, madre de Patricia y prima de Loles con la que he compartido el día. Tiene un garbo y una disposición especial y una energía desbordante y nos unen las raíces y toda una vida.
Por la tarde nos hemos ido a ver a Petra, su madre que está cerca ya de cumplir los 90 y no ha perdido la alegría y el buen humor que la caracterizan.
Y así ha posado para la Caraba con sus dos hijas, Beatriz y MªJesús y con una ranita luminosa muy simpática que además emite sonidos y luz y despierta la sonrisa del que la mira. ¡Qué guapas las tres!
Las manos de Petra han amasado muchas pastas, tortas, cocinado muhos guisos (memorables sus gazpachos), han cultivado la tierra, han cuidado animales. Son manos cálidas, vigorosas.
Y recordando vivencias se nos ha pasado el rato, comentando como ha cambiado todo, lo duros que eran aquellos tiempos, lo diferente que era la escuela.
Aquí teneis a Mª Jesús muy aplicada. Cuando la conocí lucía sus coletas, su sonrisa y una dulzura que le viene de familia.
Ahí van para vosotras los versos de Machado recogidos por Serrat en esta canción.
Y ya de vuelta a casa llego a tiempo para ver el programa de Salvados:
y el whats app empieza a sonar y a llenarse de comentarios.
El debate está servido.
Os dejo con las imágenes que he seleccionado esta mañana mientras disfrutaba del sol que entraba por la ventana.
no he pogut resistir-me i l'he compartit al meu mur de facebook... es q m'encanta Pilar. Eres genial
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